Restaurando el cristianismo original—¡para hoy!
P.O. Box 1442
Hollister, California 95024-1442
(831) 637-1875
laverdaddedios.org • truthofgod.org • churchathome.org
afaithfulversion.org • theoriginalbiblerestored.org
Diciembre 15, 2021
Queridos hermanos,
USA ha visto 2 años de COVID-19 con sus cierres; el crimen, abuso de drogas y problemas de inmigración están escalando; Rusia está amenazando atacar a Ucrania y China ya está lista para invadir Taiwán; y la administración Biden continua destruyendo el país. ¿Y qué está haciendo el pueblo americano? Corriendo a sus celebraciones de navidad.
Ellos no tienen ni idea que han sido espiritualmente cegados y engañados por Satanás el diablo. Astutamente él ha disfrazado el paganismo de ese festivo con un asunto familiar con una alegría superficial, villancicos, papá Noel para los niños, el árbol de navidad, y regalos para todos. Como “dios” de este mundo, Satanás ha en verdad “cegado las mentes de aquellos que no creen” (II Corintios 4:4)—sin embargo ¡ellos están felices en su engaño!
La gente cree que la navidad tiene que ser de Dios y la aceptan como cristiana porque el “cristianismo” del mundo se los dice. Creen que es buena porque parece buena; pero a los ojos de Dios es completamente malvada. La vasta mayoría del mundo simplemente no comprende que todo acerca de los festivos del cristianismo está basado en mentiras satánicas. Exactamente como lo revela la Biblia: “Y el gran dragón fue echado fuera, la serpiente antigua que es llamada el diablo y Satanás, quien está [activamente] engañando al mundo entero” (Apocalipsis 12:9).
Aquí hay un hecho increíble: La mayoría de la gente tiene Biblias—en la casa, en internet, en sus teléfonos—y así tienen la verdad disponible para ellos, incluyendo las advertencias de Dios en contra de observar festivos paganos. Sin embargo los celebran con celo y gusto. Si ellos no leen la Biblia, no es culpa de Dios. Él hizo disponible la verdad—así que ellos ¡han sido advertidos!
La Palabra de Dios nos dice que estas abominables celebraciones religiosas vienen directo del calderón de Babilonia la Grande—ellas son un rehacer de los misterios babilónicos, vestidos en traje moderno. Cuando al apóstol Juan le fueron dadas las visiones del libro de Apocalipsis, él escribió de esto: “Y uno de los siete ángeles que tenía los siete frascos vino y habló conmigo diciéndome, “Ven aquí; te mostraré el juicio de la gran ramera que se sienta sobre muchas aguas [pueblos, multitudes, naciones e idiomas (verse 15)]; con quien los reyes de la tierra han cometido fornicación, y aquellos que viven en la tierra se emborracharon con el vino de su fornicación.”
“Entonces me llevó en el espíritu a un lugar desolado; y vi una mujer sentada sobre una bestia escarlata que tenía siete cabezas y diez cuernos, llena de nombres de blasfemia. Y la mujer estaba vestida de púrpura y de escarlata, y estaba adornada con oro y perlas y piedras preciosas; y tenía una copa de oro en su mano, llena con abominaciones y la inmundicia de su fornicación; y a través de su frente había un nombre escrito: MISTERIO, BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA” (Apocalipsis 17:1-5).
La ramera representa las religiones de este mundo—incluyendo el “cristianismo del establecimiento.” Líderes élite del gobierno están trabajando con este sistema religioso satánico para traer un gobierno mundial—el poder de la “bestia” final de Apocalipsis 13. A través de la “élite de poder” del mundo, Satanás está causando caos y confusión en varias naciones en preparación para este final imperio gobernador del mundo: “Y me paré sobre la arena del mar, y vi una bestia levantarse del mar, teniendo siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cuernos diez coronas, y sobre sus cabezas el nombre de blasfemia. Y la bestia que vi era como un leopardo, y sus patas como las patas de un oso, y su boca como la boca de un león; y el dragón [Satanás] le dio su poder, y su trono y gran autoridad. Y vi una de sus cabezas como si estuviera herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada [el anticristo por venir—el “hombre de pecado” o “hijo de perdición” (II Tesalonicenses 2:1-12)]; y la tierra entera estuvo asombrada y siguió a la bestia.
“Y adoraron al dragón, quien dio su autoridad a la bestia. Y adoraron a la bestia, diciendo, “¿Quién es como la bestia? ¿Quién tiene el poder de hacer guerra contra él?” Y una boca hablando grandes cosas y blasfemias le fue dada; y autoridad le fue dada para continuar por cuarenta y dos meses. Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar Su nombre, y Su tabernáculo, y a aquellos que viven en el cielo. Y le fue dado poder para hacer guerra contra los santos, y vencerlos; y le fue dada autoridad sobre toda tribu e idioma y nación. Y todos los que viven sobre la tierra lo adorarán, cuyos nombres no han sido escritos en el libro de vida del Cordero muerto desde la fundación del mundo. Si alguno tiene oído, oiga” (Apocalipsis 13:1-9).
¿Qué pasará? Un evento clave sucederá en esta religión mundial, gobierno y sistema financiero final—el colapso del dólar americano. Cuando este ocurra, hundirá a todo el mundo en caos. Este colapso se deberá a nuestra deuda masiva—nacional, estatal, local, así como toda la deuda personal y corporativa. Un factor primario es la política monetaria de la Reserva Federal—por la cual se imprime dinero del aire a un nivel de 85-90 billones de dólares al mes para comprar certificados de deuda del gobierno—bonos del tesoro. Anualmente, esto es entre 1.2 y 2 trillones de dólares—todo adicionado a nuestra deuda nacional. Esto ha estado pasando por décadas y es la razón de que nuestra deuda nacional haya crecido a casi 30 trillones de dólares. Eventualmente, el dólar llegará a ser casi sin valor. Esta no es una pregunta de si pasará, sino de cuando pasará. Cuando pase, el poder de USA desaparecerá—justo como nos lo dice las profecías de Deuteronomio 28 y Levítico 26.
Tenemos dos ejemplos de colapsos económicos totales desde el último siglo. Primero, después de la Primera Guerra mundial, la República Alemana imprimió dinero para pagar las reparaciones de guerra a los aliados. Esto llevó a una inflación descontrolada. Fue tan malo que literalmente tomaba ¡millones de marcos comprar una bolsa de pan! En 1933 toda la economía alemana colapsó. Millones quedaron sin casa, desempleados y en hambre. Como canciller recién nombrado, Adolfo Hitler fue al rescate al introducir un nuevo marco alemán; luego él canceló las deudas de reparación que se debían a los aliados. La estabilidad económica volvió con una economía próspera y empleo pleno. Así, el escenario fue puesto para la Segunda Guerra mundial.
Segundo, la Unión Soviética colapsó en 1988. En aquel tiempo, el valor de un rublo disminuyó en un 3,000%! Esto significaba que si alguien tenía 3,000 rublos en un banco soviético, eso valía solo un rublo después del colapso—y no podía comprar nada. Gradualmente Rusia se recuperó durante los 1990s y comenzando los 2000s.
Estos dos ejemplos de colapso económico nos dan tan solo un vislumbre de lo que pasará en USA (y todo el mundo) cuando colapse el dólar. No hay duda que esto traerá una pobreza instantánea y sufrimiento con trastornos sociales y en los negocios alrededor del mundo. El escenario entonces será colocado para introducir la “marca de la bestia.” Justo ahora, todos los gobiernos están trabajando para darle a cada uno en la tierra un número digital. Una vez esto sea alcanzado, todas las monedas mundiales cesarán de ser usadas y la marca de la bestia será impuesta—y felizmente aceptada por la mayoría del mundo. Si usted no tiene la marca, ¡será incapaz de comprar o vender!
Hay dos Proverbios que describen aptamente este desastre económico por venir: “El rico gobierna sobre el pobre, y el prestatario es esclavo del prestamista.… No te afanes por hacerte rico;… [porque] cuando tus ojos lo considera, ¡se ha ido! Porque ciertamente las riquezas hacen alas para sí mismas, y vuelan al cielo como un águila” (Proverbios 22:7; 23:4-5).
Aquí esta cómo probablemente pasará: Esta catástrofe económica y financiera por venir causará que todas las naciones caigan en luchas internas—gente yendo a la violencia para sobrevivir. Habrán guerras civiles, saqueos por pandillas y la violencia llenará las calles. El mundo demandará una solución internacional—y la respuesta será el poder de la bestia de Apocalipsis 13: un nuevo gobierno mundial con un nuevo líder y un nuevo sistema financiero—¡la marca de la bestia!
¿Podrían estos eventos ser demorados? Una respuesta de si depende de algunas cosas: 1) Si la administración Biden colapsa, los Republicanos podrían tomar ambas casas del congreso en el 2022. 2) Ellos podrían pasar políticas fiscales sanas para mitigar la presión en contra del dólar. 3) Si los Republicanos también ganan la Casa Blanca en el 2024, esto podría dar tiempo adicional para detener temporalmente la caída del dólar americano al olvido completo. 4) Si estas cosas ocurrieran, también habría una expansión de la actividad de negocios, lo cual reduciría grandemente el problema de desempleo e incrementaría la ganancia de impuestos—tal vez lo suficiente para reducir el déficit anual fiscal del gobierno.
Pero también tendría que haber un despertar espiritual y un volver a la moralidad por mucha gente en USA. Primero, suficiente gente tendría que volver a Dios, por lo menos a la verdad y honestidad, para hacer que Él temporalmente levante Su mano de juicio en contra de nosotros. Primariamente, esto significaría casi que completo fin al aborto. En el tiempo presente, la Corte Suprema está considerando un caso que podría casi que eliminar el aborto en la mayoría de estados. Pero los abortos aun serán permitidos en los estados liderados por demócratas. Segundo, esto tendría que involucrar un volver a la observancia de los mandamientos de la ley en la letra de la ley para un gran número de personas e iglesias. Tercero, un numero significante de iglesias necesitarían repudiar la observancia del domingo y abrazar el Sábado semanal.
En el tiempo de Jeremías, Dios ofreció misericordia por arrepentimiento: En los años que llevaron a la caída de Jerusalén y Judá a Babilonia, Dios trató con los Israelitas a través del profeta Jeremías para que abandonarán sus pecados de modo que no verían la caída de su nación ni irían a cautividad: “La Palabra que vino a Jeremías de parte del SEÑOR, diciendo, “Párate en la puerta de la casa del SEÑOR, y proclama allí esta Palabra, y di, ‘Oiga la palabra del SEÑOR, toda Judá, quienes entran en estas puertas a adorar al SEÑOR.’ ” Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel, “Corrijan sus caminos y sus hechos, y Yo les haré vivir en este lugar. No confíen en palabras mentirosas, diciendo, ‘El templo del SEÑOR, el templo del SEÑOR, el templo del SEÑOR son estos.’ [Hoy: “Somos el pueblo de Dios.”] Porque si ustedes corrigen completamente sus caminos y sus hechos; si ejecutan completamente juicio entre un hombre y su prójimo; si no oprimen al extranjero, al huérfano, y a la viuda, y no derraman sangre inocente en este lugar, ni caminan tras otros dioses para su mal; entonces Yo los haré habitar en este lugar, en la tierra que di a sus padres, por siempre y para siempre. He aquí, ustedes confían en palabras mentirosas que no pueden beneficiar.”
Dios continua: “¿Robarán, asesinarán, y cometerán adulterio, y jurarán falsamente, y quemarán incienso a Baal, y caminarán tras otros dioses a quienes no conocen; Y luego vendrán y se pararán delante de Mi en esta casa la cual es llamada por Mi nombre, y dirán, ‘Somos libres de hacer todas estas abominaciones’? ¿Ha llegado a ser esta casa, la cual es llamada por Mi nombre, una guarida de ladrones a sus ojos? He aquí, incluso Yo lo he visto,” dice el SEÑOR” (Jeremías 7:1-11).
Nuevamente, a través de Jeremías Dios llamó a Judá al arrepentimiento—que si se arrepintieran y diligentemente escucharan a Dios, entonces Él los bendeciría y retendría Su mano de juicio, y permanecerían en la tierra. “Así el SEÑOR me dijo, “Ve y párate en las puertas de los hijos del pueblo, por las cuales entran los reyes de Judá, y por las cuales salen, y en todas las puertas de Jerusalén. Y diles, ‘Oigan la Palabra del SEÑOR, reyes de Judá, y toda Judá, ¡y todo el pueblo de Jerusalén quienes entran por estas puertas! Así dice el SEÑOR, “Presten atención a ustedes mismos, y no lleven carga en el día Sábado, ni la traigan por las puertas de Jerusalén. Ni saquen una carga de sus casas en el día Sábado, ni hagan ninguna obra, sino guarden el día Sábado santo, como ordené a sus padres. Pero ellos no obedecieron, ni inclinaron su oído, sino hicieron sus cuellos duros, así que no pudieron escuchar ni recibir instrucción.
“Y será, si diligentemente Me escuchan,” dice el SEÑOR, “para no traer carga a través de las puertas de ésta ciudad en el día Sábado, sino guardan el día Sábado santo, para no hacer obra en el; entonces reyes y gobernadores sentados en el trono de David entrarán en las puertas de ésta ciudad, montando en carruajes y en caballos, ellos, y sus gobernadores, los hombres de Judá, y el pueblo de Jerusalén. Y ésta ciudad permanecerá por siempre” (Jeremías 17:19-25).
Hoy, USA es confrontada con casi la misma desobediencia—pecados y rebelión como Jerusalén y Judá estaban cometiendo en los días de Jeremías. Pero de nuevo, Dios les advirtió que si no se arrepentían y Lo obedecían, entonces las consecuencias severas de destrucción y cautividad ciertamente seguirían. Hoy nosotros estamos en la misma encrucijada. ¿Cómo haremos como nación? El tiempo lo dirá. Dios ultimadamente declaró a Judá que Él ejecutaría Sus juicios si ellos no se arrepentían y volvían a Él: “Pero si no Me escuchan para guardar el día Sábado santo, y no llevar una carga, incluso entrando en las puertas de Jerusalén en el día Sábado; entonces encenderé un fuego en sus puertas, y este devorará los palacios de Jerusalén, y no será extinguido” (verso 27).
¿Qué deberíamos hacer? Como los hijos verdaderos de Dios el Padre, para nuestra parte, necesitamos caminar en el camino del Señor. Necesitamos guardar en la frente de nuestras mentes el primer y más grande mandamiento, como Jesús declaró: “‘Amarán al Señor su Dios con todo su corazón, y con toda su alma, y con toda su mente.’ Este es el primero y más grande mandamiento; y el segundo es como este: ‘Amarán a su prójimo como a ustedes mismos.’ De estos dos mandamientos pende toda la Ley y los Profetas”” (Mateo 22:37-40). Entonces necesitamos amar a los hermanos, como Jesús nos ha amado (Juan 13:34).
La falla del cristianismo en USA: Hace algunos años, nuestro editor, Philip Neal, escribió el folleto ¿Por qué el cristianismo está fallando en USA? Es verdaderamente asombroso atestiguar cuan rápidamente el protestantismo está declinando en USA, especialmente después de 2 años de encierros. 50% de las iglesias pueden nunca más abrir—y es evidente que Dios ya las había dejado hace mucho.
Hermanos, estamos viviendo en tiempos muy difíciles. Así que acerquémonos a Dios cada día en oración sentida y en el estudio de Su Palabra. Esta es la única forma en que podemos continuar creciendo en gracia y conocimiento, mientras desarrollamos carácter piadoso y amor en preparación para el regreso de Jesucristo—de modo que podemos reinar con Él mientras Él gobierna y trae salvación a este mundo.
Damos gracias a Dios el Padre y a Jesucristo por Su bondad y misericordia. Nuevamente, gracias por su amor y fidelidad a Dios y unos a otros. Gracias por sus oraciones por nosotros y por todos los hermanos. Nosotros agradecemos su constancia en diezmos y ofrendas, especialmente en estos tiempos difíciles. Oramos que Dios continúe bendiciéndolos en todo, y que Dios velará por ustedes y los protegerá en toda manera. Oramos por ustedes diariamente, por su salud y su sanidad a través del amor y gracia de Dios.
Con amor en Cristo Jesús,
Fred R. Coulter
FRC